Nada en esta crisis puede analizar bajo la óptica de la economía
tradicional………………
El gráfico que encabeza este artículo es enormemente elocuente y
refleja la dinámica del oro desde el inicio de la crisis hasta la actualidad.
Observamos que por junio del 2007 el GLD (ETF que replica al oro) se ubicaba en
63 y a fuerza de QEs el GLD llega a su máximo histórico de 188 en agosto del
2011.
Pero así como hay una ley de gravedad en la física, hay una equivalente
en finanzas: los árboles no crecen
hasta el infinito y esta misma ley es la que actualmente se está devorando a un oro que en octubre del 2012 desde 173 comenzó un colapso histórico que actualmente lo ha llevado a niveles de 115 generando un retorno negativo de 33% y al observar cómo viene operando parecería querer desafiar los 1,000 en algún momento próximo.
hasta el infinito y esta misma ley es la que actualmente se está devorando a un oro que en octubre del 2012 desde 173 comenzó un colapso histórico que actualmente lo ha llevado a niveles de 115 generando un retorno negativo de 33% y al observar cómo viene operando parecería querer desafiar los 1,000 en algún momento próximo.
Lo del oro es otro ejemplo más de lo importante que son las puestas de
moda de historietas y de lo crueles que son cuando dejan de estarlo. No tener
oro en una cartera del 2011 parecía hasta anti-profesional y sin embargo hoy no
quedó uno sólo de los bulls (optimistas) que lo veían en 2,000 dando vueltas.
Es cierto que parecería que el entorno mega-acomodativo de la Fed que tanto
inflacionó al oro está siendo cuestionado en el seno más íntimo del equipo de Bernanke
pero tampoco hay que pasarse de rosca: la Fed seguirá acomodativa y
reflacionaria por muchos años más pero sin embargo, los bulls-oro parecerían
haber tirado la toalla por completo y hasta parece que el oro está capturando
toda la preocupación de una Fed en retirada en un solo activo.
Hay mucha discusión de para qué sirve el oro. Es cierto que el oro
tiene carry negativo lo cual ya de entrada es un problema. El carry negativo
proviene del hecho que el oro tiene un costo implícito de almacenaje lo cual
sería comparable a un bono con cupón negativo por lo que toda posición long oro
requiere necesariamente un view subyacente que apuesta directamente a su
apreciación.
Pero independientemente de cuestiones de carry, a los rallies del oro
se los asocia con entornos inflacionarios por lo que el oro se ganó la fama de
ser un hedge contra la inflación. Y muchos hoy en día dicen que el colapso del
oro se refiere precisamente a que no se está viendo una aceleración
inflacionaria por ningún lado. Ese enfoque es en el contexto actual, incorrecto
por una sencilla razón: desde que comenzó la crisis tampoco había inflación por
ningún lado y sin embargo el oro subió desde 63 (6/07) hasta 183 (8/11) o sea,
190% en un entorno absolutamente deflacionario.
Es por esta razón que pretender incorporar inflación en su definición
tradicional para explicar el oro en el mundo de tres QEs y tasa en cero de
Bernanke es un error. De hecho, nada desde el comienzo de la crisis se puede
explicar desde la óptica de la economía tradicional.
Por el contrario, comprender la dinámica del oro durante esta crisis es
entender que el mismo fue un hedge perfecto contra los excesos de Dólares vía
QEI, QEII y QEIII que a pesar de no ser inflacionarios han licuado el valor
adquisitivo del Dólar contra casi todos los activos reales del planeta. No fue
la inflación en su definición tradicional sino la reflación de activos
financieros la que explica el formidable rally del oro desde junio del 2007
hasta fines del 2012. Por lo tanto intentar comprender qué hace el oro en 1,200
nos obliga a buscar qué expectativas de futuras QEs están siendo descontadas
actualmente en el mercado de oro.
El oro podrá o no estar haciendo overshooting (baja exagerada) el
tiempo lo dirá, pero lo cierto es que esta vez fue el oro el que mejor anticipó
un cambio potencial en la estancia ultra-acomodativa de la Fed mucho antes del
mismísimo mercado de bonos. Para el dolor inconsolable de los todavía oro-bulls
(optimistas oro) este activo ha sido elegido para descontar y hasta incluso
exagerar los impactos de una potencial retirada gradual pero fulminante de la
Fed. Para el dolor de los oro-bulls el oro es el primer mercado en sincerar una
realidad que trasciende a los QE de Bernanke y parecería no querer parar hasta
los 1,000, número que sólo meses atrás parecía un chiste. La conclusión es muy
clara: nada sube hasta el infinito y qué duro es soportar un activo que pasa de
moda. Parecería que otros vientos han comenzado a soplar y los mismos son
oro-bearish.
Germán Fermo,
Ph.D. Director, MacroFinance
Fuente : Capital Bolsa.